Recibí una noticia sobre un movimiento evangelístico espontáneo que está tomando a la ciudad de Orlando para el Reino de Dios. Mi primera impresión fue: “¡Gloria a Dios! Le estamos ganando el pleito a Micky Mouse y su pandilla”. Pero al leer el artículo, noté que el autor se enfoca en una tesis discutible: “este movimiento viene a ser la salvación de la fe, en un contexto en el que hay más cierre de iglesias cristianas de las que abren en Estados Unidos”. Y me pregunté: “¿Será cierto? Veamos.
La noticia de cierre de iglesias en Estados Unidos que se está propagando como pólvora
En mi breve andar por la investigación, análisis y redacción de textos de calidad, aprendí a cuestionar todo lo que leo en Internet. Luego de enormes decepciones con el contenido que encuentro en la web, podría decir que tengo una relación de amor y odio con la red de redes. Así que, con el tiempo, también aprendí a identificar cuando una noticia puede ser fake news o noticia falsa. Aun si el autor de esta es un hombre o una mujer de Dios.
Pero espera un momento, ¡no nos apresuremos! Todavía no te he dicho que esa noticia sea falsa. Y no te diré que hagas una búsqueda rápida en Google, porque encontrarás una maraña de basura que no está relacionada con nuestra discusión. Ya sé que hay muchas preguntas por contestar. No te culpo: yo también tuve una tormenta de interrogantes cuando me enteré.
Pero aquí estamos para contestarlas todas. Empecemos por la siguiente: ¿quiénes están informando sobre el cierre de iglesias? Hasta donde pude investigar, lo hacen la Asociación de Comunicadores Cristianos de México (ACC-México); el prestigioso tabloide cristiano Religion News; el centro de investigación cristiana Life Away Research y el International City/Country Management Association.
En mi caso, el origen de la noticia fue la ACC de México. Mi característica curiosidad me llevó a las demás publicaciones. Esto nos lleva a la siguiente cuestión: ¿si todas estas fuentes parecen ser fiables, por qué no deberíamos alarmarnos con el supuesto cierre de iglesias en Estados Unidos? Analicemos esto a continuación.
Si el cierre de iglesias es una realidad en Estados Unidos ¿Será porque hay menos cristianos que antes?
Vamos a darles el beneficio de la duda. Diversas investigaciones aseguran que la caída de feligreses en las iglesias es una realidad. Y, apostillan, que es un hecho que afecta a todas las denominaciones. Estudios tan prestigiosos como el de la Gallup sostienen que la membresía se ha reducido desde un 76% en 1930, hasta un 47% en 2019.
Supongamos que ese hecho es totalmente cierto. Pero, ¡un momento! ¿Cuál era la población estadounidense en 1930? En Datos Macro encontramos que eran 123 millones de personas. ¿Y en 2019? Alrededor de 330 millones. ¡Casi tres veces más! Parece que esto es cuestión de números. ¡Vamos, usemos las neuronas unos segundos!
Según mis cálculos, podemos decir que en 1930 había 94 millones de cristianos. ¿Y en 2019? ¡155 millones de estadounidenses que creen en un Cristo vivo y de poder! ¿Cómo llegué a esta conclusión? Calcule el porcentaje de cristianos en proporción con la población de los años de referencia. De modo que, cuando te digan que en Estados Unidos hay menos cristianos que antes, ya te he dado un argumento sólido para rebatir.
Cuando te digan que en Estados Unidos hay menos cristianos que antes, ya te he dado un argumento sólido para rebatir.
José Gomera
Algunas dudas sobre la noticia del cierre de iglesias en Estados Unidos
Las cuatro fuentes mencionadas, basan su tesis en otras investigaciones hechas por organizaciones con una alta reputación. Sin embargo, admiten que, al apresurarse a dar un dato sobre el tema, podrían entrar en el terreno de los sesgos. Dicho de otro modo, si dices que están cerrando más iglesias de las que abren y no ofreces datos concluyentes, podrías estar apoyando una falsedad. Y eso, eso amigos míos, podría desprestigiar a un comunicador.
Más que en una investigación concluyente, la mayoría de las publicaciones basan su “noticia” (y sí, creo que ya puedo utilizar mis comillas asesinas) en análisis “sesudos” de otros periodistas, autores o comunicadores. Siguiendo las fuentes de investigación, llegué al artículo original, el primero que publicó sobre el tema: el texto de Aaron Earl en Life Away Research.
Como base de su análisis, Aaron presenta la siguiente gráfica:
La estadística dice que, en 2019, abrieron 3,000 lugares de culto, frente a 4,500 que cerraron. ¿Muy grave, verdad? Aunque lo haya hecho un centro especializado en estudios cristianos, no usaría este dato para apoyar ninguna tesis. ¿Por qué lo digo?
- Primero, porque especifica que se basa en una estimación. Lo que nos lleva a lo segundo:
- al ser una estimación, tenemos números redondos (4,000; 3,700). Y ya sabemos que en una muestra tan alta es casi imposible que se arroje como resultado un número redondo.
Si dices que están cerrando más iglesias de las que abren y no ofreces datos concluyentes, podrías estar apoyando una falsedad. Y eso, eso amigos míos, podría desprestigiar a un comunicador.
José Gomera
Pero supongamos que este dato sea cierto. ¿Cuántas iglesias hay en Estados Unidos? Alrededor de 384 mil. Si confirmamos el dato, la diferencia es de 1,500 iglesias que desaparecieron en 2019. Siendo así, ¿es significativo ese 1%? ¡No lo creo!
Una rango estadístico de cierre de iglesias demasiado alto
Pero la publicación de ICMA es aún más imprecisa. ICMA, un blog de una institución no cristiana, pinta un panorama de cierre de iglesias de terror. Esta organización, sin basarse en ningún estudio, sostiene que, fruto de las secuelas de la pandemia, en Estados Unidos cerrarán alrededor de ¡100 mil iglesias! ¡Por su propia salvación, yo espero que Dios no esté leyendo su publicación!
Peor aún, ICMA sostiene que “En la última década, entre 3.850 y 7.700 lugares de culto han estado cerrando por año en los Estados Unidos, o de 75 a 150 congregaciones por semana”. ¡Espeluznante! Pero aquí sí menciona que se basa en datos del Center for Analytics. Sin embargo, no muestra la fuente específica ni enlaza hacia la investigación de donde tomó los datos. La pregunta es ¿Por qué tenemos que creerle?
No sé si notaste algo aún más raro en los datos de ICMA: utiliza un rango estadístico de los datos demasiado grande. Habla de 3,850 a 7,700 y de 75 a 150 cierres de iglesias. En una muestra tan grande, esto es un error. Esto agrega otro ingrediente de infiabilidad a la publicación.
Finalmente: ¿Realmente están cerrando más iglesias de las que abren en Estados Unidos?
Si bien es cierto que la pandemia del coronavirus ha dislocado las actividades cotidianas de las personas, incluidas las espirituales; no es menos cierto que ha unido a las persona de fe con un gran propósito: mostrar el amor de Cristo mediante obras de caridad; atendiendo a las personas con necesidades; aliviando su dolor; y mostrándoles que ningún gobierno terrenal tiene la capacidad de resolver sus problemas; que el gobierno celestial sí lo hará.
También es cierto que, en algunas iglesias, el retorno de sus miembros al templo ha sido paulatino. Miles de hermanos tienen miedo de congregarse y ser contagiados, otros tantos, tienen serios problemas de salud y quieren evitar los riesgos que les acarrearía estar ante una multitud. Esto si es un hecho. Como también es un hecho que los enemigos de la fe están aprovechando esta circunstancia para mostrar “argumentos infalibles” a su relato de “templos vacíos”, “alfolíes medio llenos” y “una fe en decadencia”.
Sin embargo, el siguiente documental de DW desmiente todas esas afirmaciones.
Pero no es esto lo que me preocupa. Ya sabemos que este tipo de gente ha existido desde los tiempos de Noé. Y, hasta que Cristo nos lleve con Él, siempre debemos lidiar con ese problema. La gran preocupación es ver como comunicadores cristianos se hacen eco de una noticia cuya fuente ni siquiera muestra seguridad de que esto sea cierto.
Es decir, preocupa ver cómo los hombres de fe utilizan sus talentos para hacerles el favor a los enemigos de Dios. Como decimos en mi terruño: “le están haciendo el coro al diablo”. Ya sea por error o por omisión, ¡esto es realmente preocupante! Como comunicador, reviso siempre la fiabilidad de mis fuentes. Más aún cuando se trata de contenido que puede hacer tambalear la fe de los nuevos creyentes o que puede llenar de balas la pistola de quienes disparan sus mentiras contra la fe cristiana.
¿El cierre de iglesias es una realidad en tu comunidad?
Mira a tu alrededor. Estoy seguro de que no hay una sola iglesia cerrada. En el lugar donde vivo, Villa Mella, Santo Domingo Norte, no ha cerrado ninguna iglesia. Al contrario, donde me congrego, la Iglesia Mahanaim, no para de crecer. Es un templo inmenso y ya parece que el espacio se va quedando corto. La iglesia donde me congregaba está construyendo otro templo mucho más amplio. ¡Y lo está haciendo ahora mismo, en tiempos de pandemia!
Mejor aún, Margarita Gomera, Mary Alcantara, Agustin Carela y miles de misioneros más están predicando La Palabra por todo el mundo. Incluso, cuando eso implique poner en riesgo sus propias vidas. Como resultado, decenas de iglesias son plantadas todos los días, en todas partes del mundo. En lugares como China, donde está prohibido ser cristiano, las iglesias cristianas no paran de crecer.
Cuidado con las noticias que lees
Leer noticias no es malo. Leer demasiadas noticias sí que lo es. Vemos como podemos encontrar fake news incluso en tabloides de corte cristiano. Entonces, ¿Qué debemos leer? Sigue enterándote de las noticias, todos los días. Los cristianos debemos saber lo que pasa a nuestro alrededor. Pero no le dediques demasiado tiempo ni te preocupes mucho. Recuerda que tenemos una esperanza viva y que nuestro paso por este mundo es temporal.
Como comunicador, reviso siempre la fiabilidad de mis fuentes. Más aún cuando se trata de contenido que puede hacer tambalear la fe de los nuevos creyentes o que puede llenar de balas la pistola de quienes disparan sus mentiras contra la fe cristiana.
José Gomera
Una cosa más: ¡cuidado con lo que lees! Cuando se trata de noticias que pueden poner en tela de juicio tu fe en Cristo, como el cierre de iglesias, por ejemplo; analízalas bien, sigue la fuente y, si no te sientes con la capacidad de hacer eso; pásalas por alto. Asistimos a un mundo que es gobernado por personas que se resisten a creer en Cristo, aunque confiesen lo contrario. La resistencia a La Palabra de Dios es cada vez más fuerte. Y lo peor es que, sabiendo que la mayoría de la gente se fía de lo que se publica en un periódico, lo utilizan para confundir.
En la Revista PALFCRIS, te mantenemos al día con los temas que te ayudan a crecer en Cristo. Además, publicamos verdaderas guías sobre cómo debería un cristiano leer las noticias y respecto a qué periódicos deberíamos leer. Hacemos este esfuerzo editorial ante la imperiosa necesidad de encender una luz en las oscuras tinieblas “informativas” de Internet.
Ahora tienes un texto que te sirve de guía para analizar cuando una noticia pude ser falsa o no. Comenta cómo ha afectado la pandemia a tu congregación, si ha disminuido o aumentado la cantidad de miembros y cómo el activismo de la iglesia en favor de tu comunidad ha aumentado la imagen institucional de tu congregación. ¡Únete a la conversación!